AL FINAL DEL PASILLO
Pedro era un vendedor inmobiliario de mucho éxito que en poco tiempo consiguió
demostrar que estaba entre los mejores de su zona, y por ello, cada vez que
alguien quería vender su vivienda, no dudaba en contactar con él, ya que
conseguía los mejores precios y sin dudar también las mejores condiciones.
Muchas veces se agobiaba de tanto trabajo como tenía, ya que
aunque se trataba de una población mediana, su fama era tal que raro era el día
que no lo llamaban para visitar una nueva vivienda cuyos propietarios querían
poner en venta, o clientes ansiosos por encontrar una casa en la que vivir
durante años felices sin por ello tener que renunciar a unas fantásticas
opciones de pago.
El caso es que comenzó a cansarse y llegó un momento en el
que decidió contratar un compañero con el que combinar las tareas, el cual se
encargaba de realizar las primeras visitas para que Pedro se hiciese una idea
de lo que se iba a encontrar y poder así tener una primera valoración para encajar
a los posibles compradores.
Un día de madrugada, poco antes de que sonase el
despertador, una llamada despertó a Pedro de su profundo sueño. Contestó y un
amable hombre que parecía ser bastante mayor le ofreció la posibilidad de
visitar un viejo edificio abandonado ideal para vender a un promotor para que
lo reformase.
Sin duda se trataba de una posibilidad fantástica para ganar
una buena cantidad de dinero, por lo que aceptó y llamó a su compañero, al cual
no había forma de localizar. Él tampoco podía acudir porque tenía su agenda
completa, por lo que decidió quedar con el hombre a última hora de la tarde.
Al llegar nadie lo esperaba, pero decidió dar un paseo para
conocer algunos de los puntos fuertes de la construcción, hasta que llegó a una
puerta atascada, la cual pudo abrir a base de mucho esfuerzo. Al mirar en su
interior tan sólo se veía un pasillo trasversal, pero en el momento de ir a
girar su cabeza a la izquierda, de repente notó una presión sobre la parte
superior que le impedía girarla, y ahí fue cuando su vida llegó al final del
recorrido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario